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La luminaria industrial LED con sensor ha sido durante mucho tiempo una parte tan importante de nuestra vida diaria que a menudo no pensamos en cuánta menos energía consumen que las bombillas incandescentes convencionales. Un sensor de luz LED para exteriores tampoco es una rareza; Las lámparas fluorescentes industriales proporcionan una luz agradable en muchas oficinas y trasteros.
Hoy en día, las luminarias de techo industriales están equipadas con un sensor que activa las lámparas solo cuando alguien se acerca a ellas, o el sensor se puede configurar para encender y apagar las lámparas después de la hora. El trabajo del reflector con el sensor generalmente se ubica en lugares donde no hay mucho movimiento y por lo tanto no se queman, es decir, cuando gastas energía. Sin embargo, si necesita encontrar algo en un rincón más oscuro del territorio, la luminaria se iluminará sin presionar el interruptor. También se vende un reflector con batería LED donde no llegan los cables eléctricos; así como foco de campo LED.
Una farola es una de esas fuentes de luz que no tiene que funcionar todo el tiempo. El alumbrado público LED en las ciudades, así como en los pueblos más pequeños, se suele regular para que se encienda a una hora determinada y se apague cuando la luz de la mañana sea suficiente. Las farolas LED más nuevas y modernas responden a la cantidad de luz que cae sobre sus sensores en lugar de sobre el reloj. De esa manera, pueden incendiarse a la mitad del día antes de una tormenta eléctrica en las condiciones que de repente se oscurecieron, y no incendiarse en nuestras blancas noches de verano.